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lunes, 8 de diciembre de 2014

Ouija

Elijah J Bond


A lo largo de la historia del espiritismo, la Ouija siempre ha sido un elemento muy importante. No se sabe con exactitud cuál es su origen, de hecho aún hoy es desconcertante. Se cree que el origen de la Ouija se halla a finales del siglo XIX, cuando el espiritismo empezó a ser toda una moda en occidente. Según los archivos de la época su inventor fue Elijah J. Bond. La tabla de la Ouija se registró el 28 de mayo de 1890. Uno de los titulares de este “juego” fue Charles W. Kennard, se dice que este inventó su nombre. Según Charles la palabra Ouija era una palabra egipcia que significaba “mala suerte”. Más tarde se afirmó que esto no era cierto. La patente de este tablero fue vendida a Williams Fuld. El señor Fuld dijo que la palabra Ouija estaba compuesta por dos bases; OIU-JA. Oui es sí en francés y ja en alemán



Este tablero tiene como objetivo contactar con los muertos, espíritus y entes que quieran comunicarse con el que juega. El jugador por lo general tiene un puntero con un pequeño cristal el cual señala las letras del abecedario, el SI, el NO, los números del 1 al 0 o la palabra hola y adiós que posee la tabla de la Ouija. También hay quien utiliza un vaso de cristal. El jugador o jugadores deben poner su dedo índice en cima del puntero o del vaso y hacer la pregunta que corresponda. Por lo general la primera pregunta es; ¿hay alguien que quiera comunicarse con nosotros?


foto Google
Ante todo debo dejar claro que este post no consta para enseñar a usar una Ouija si no para informar sobre ella. Y no recomiendo en absoluto jugar con ella, ya que cuando invitamos a entrar a un “ente o energía” del cual no sabemos nada, nos arriesgamos a que este no sepa volver y termine quedándose en nuestro campo energético. Las historias que os quiero compartir son reales


Muchas de las personas que han tenido “respuestas” con la Ouija coindicen en que al principio esos “mensajes o respuestas” que recibían les elogiaban. Les decían que tendrían dinero, amor, salud… De esta manera quedaban enganchados a usar el tablero, ya que este (o lo que se escondía detrás de él) les transmitía un mensaje de esperanza y poder. Pero conforme la iban usando se iban volviendo agresivos, depresivos e incluso manifestaban terrores nocturnos o pesadillas. Estas personas decían que el tablero se alimentaba de su energía, pero no creían que fuera el tablero en sí sino lo que habían invitado a entrar en su vida.
 
Los primeros en usar la Ouija son los que se ven impulsados por la curiosidad; ¿realmente funciona? Vamos a ver qué ocurre… Pero no se dan cuenta que de esta manera desafían a la energía que entre en contacto con ellos. Después de que la curiosidad les mueva, sale a la luz la posibilidad de contactar con los seres queridos que ya no están. Ese es el mayor enganche de la Ouija.

Normalmente los curiosos dejan de utilizar la Ouija una vez han satisfecho su curiosidad, ya que si es cierto que en muchos casos no ocurre nada, o al menos eso parece. Después los que querían contactar con algún ser querido o ente que allí se encuentre y no obtengan respuesta, inmediatamente pierden la fe, no solo en la Ouija si no también en el plano espiritual. Aquí es cuando entra en juego el desencanto y la desilusión. En cambio los que obtienen respuestas experimentan una obsesión maléfica por el tablero.
 
Puntero y Tabla de la Ouija


Muchas personas creen que al iniciar el juego de la Ouija, se abren puertas que conectan con otras dimensiones diferentes a la nuestra. Estas dimensiones no son perceptibles para nosotros. Los defensores del ocultismo creen que cuando se “conecta con estas entidades” a través del tablero, realmente se conecta con algo llamado “bajos astrales”. Estos bajos astrales suelen ser entidades que están poco evolucionadas y que siguen muy apegadas al mundo físico, generalmente se las conoce como almas en pena. Almas o entidades que no han sabido evolucionar o que aún tienen cuentas pendientes en este mundo. Estas quieren manifestar su situación al mundo de los vivos y en muchas ocasiones se pueden enganchar al campo magnético del que juega con el tablero.
 
Aunque si hay un peligro alarmante sobre el uso de la Ouija este es sin duda el que afecta a los aspectos psicológicos y emocionales del participante. En este caso sí que quiero hacer una llamada de atención ya que es un peligro que no todo el mundo puede controlar.

La Ouija crea atracción y las personas inmaduras emocionalmente pueden verse enganchadas hasta el punto de que este tablero sea una adicción para ellas. En estas ocasiones el participante solo recuerda las respuestas de la Ouija que son más o menos coherentes y olvida todo lo demás. Se aferra a la idea de afirmar que el tablero funciona y lo ayuda a evolucionar.
El tablero no es recomendado para personas que poseen algún tipo de enfermedad mental o componentes patológicos; esquizofrenia, comportamientos obsesivos… Ya que la autosugestión puede dar pie a alteraciones de esta índole.
Para las personas que han perdido un ser querido la Ouija se manifiesta como una herramienta de contacto para llegar hasta ellos. En este caso no se cree que sea el momento más oportuno para utilizar este tablero u otros métodos de contacto con espíritus ya que no estaríamos siendo objetivos.
La Ouija debe de quedar en manos de profesionales y personas que estén investigando sobre algún tema en concreto; parapsicólogos, psicólogos…
 
A continuación os comparto algunas historias reales que les han sucedido a personas al utilizar el tablero de la Ouija. Espero que esta información os haya ayudado, pero sobretodo evitar “jugar” con lo que no se puede controlar.

La historia de Andrea


foto Google
Andrea era una chica venezolana que perdió a su madre a los 15 años de edad. Tres años después junto a unas amigas, decidió comenzar a jugar a la Ouija. Comenzaron la sesión o partida realizando la típica pregunta de si se trataba de un espíritu bueno o malo. La entidad comenzó a deletrear el nombre de Andrea reiteradas veces, junto con fechas que eran muy significativas para su familia.
Presenciando esto Andrea decidió sacar el dedo cortando de golpe la conexión que se había establecido, lo que provocó la ira del espíritu atacando a sus amigas, pero sin tocarla a ella. Después de un tiempo de ataques violentos, ante el grito desgarrador de Andrea toda la actividad paranormal cesó inmediatamente y enseguida decidió llamar a un médico para que atendiera a sus amigas. Andrea estuvo detenida tres días, pero ante la declaración de sus amigas de que ella nada había tenido que ver con ese ataque, salió en libertad. Cuando pasaron algunos meses, la joven llego a la conclusión de que la entidad que se presentó durante esa sesión de Ouija había sido su madre, quien solía ser muy posesiva y no la dejaba tener ningún tipo de amistad ni relación con otras personas.

Estefanía


foto Google
El caso de Estefanía Gutiérrez ocurrió así: esta niña jugó con sus amigos en el colegio a la Ouija, pero este juego fue interrumpido y por consecuencia la supuesta alma a la cual estaban consultando se quedo perdida en estos tiempos. A partir de este día la vida de esta niña Estefanía Gutiérrez, así como para su familia, fue una pesadilla.

Al parecer Estefanía, presentó continuas convulsiones, así como apariciones de hombres con trajes negros que le comunicaban que se iría con ellos al más allá.

Finalmente Estefanía muere a causa de una fuerte convulsión de la cual no se pudo reponer. Pero los hechos no terminan con este fatídico final de la vida de Estefanía Gutiérrez, porque a hasta la fecha, en la casa que habito Estefanía, suceden innumerables hechos inexplicables y aterrorizantes. Los movimientos de las puertas, crucifijos arrancados y puestos de cabeza y demás.
Resulta lamentable, saber que este es sólo un caso de los innumerables acontecimientos o de personas que fueron víctimas de la Ouija.

Dennis y David
 
foto Google
De todas las historias de la Ouija que más se han estudiado en la parapsicología, sin duda el caso más grave fue el de Denis y David, dos chicos satanistas de 20 años que utilizaban la Ouija para comunicarse con quien ellos llamaban su “amo”. La noche del 22 de Diciembre de 1995 David persuadió a dos compañeros suyos de la escuela para que fueran a su casa a escuchar música. Cuando entraron en la habitación descubrieron un altar iluminado con velas y cubierto con un paño negro donde se encontraba situada una tabla Ouija. Los dos chicos aceptaron participar de la sesión, y así fue como los cuatros comenzaron con las preguntas. El primero en preguntar fue David, que al percibir una presencia dijo “si eres Satanás dime qué quieres y lo hago”.

Frente a esto los dos chicos invitados se sintieron incómodos y decidieron dejar de participar. Justo en el momento en que se estaban yendo, Dennis sacó una navaja y tomo a uno de los chicos por el cuello, diciéndole que nadie se iría a ningún lugar hasta que la voluntad de su amo fuese cumplida. En ese mismo momento comenzó a apuñalar al chico frenéticamente hasta que David, por encima de su hombro, le dijo que se detuviera y así lo hizo. El otro chico logró escapar durante el ataque e informo a la policía de lo sucedido

Al día siguiente encontraron el cuerpo del joven completamente descuartizado y a David y Dennis durmiendo prácticamente bañados en su sangre. A Ambos los condenaron por homicidio no premeditado ya que Dennis aseguraba que unas voces en su cabeza le ordenaban cometer el asesinato. Lógicamente fue enviado a un instituto psiquiátrico donde se encuentra a los asesinos dementes. Por su parte David se recuperó en un hospital psiquiátrico y hoy en día lleva una vida normal, aunque carga con los estigmas de haber participado en una escena semejante.


Son historias documentadas, seguramente la sugestión y la fuerza sobre el control psicológico que acarrea este “juego” hayan tenido mucho que ver en todas ellas.
 

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